-WQOWjIqPrzeKpDbadcYUstRQCLcBGAs/s1600/whatsapp_image_2017-09-10_at_13.16.07.jpeg' name='twitter:image'/> Running to the edge. : septiembre 2015

jueves, 24 de septiembre de 2015

¡Por fin! Disfrutando de una carrera... Cross Pinsimar La Marina (Elche)

Desde hace algún tiempo no levanto cabeza. Sí, ¿qué le vamos ha hacer?  Molestias de toda índole me han atormentado estos últimos meses. He llegado a pensar que algún virus he llevado de pasajero cual Alien en el Nostromo. Primero fue una anemia y luego unos dolores lumbares que finalmente (parece ser) son debidos a cálculos renales... El caso es que hasta hace dos semanas no pude lanzarme a tumba abierta por sendas y caminos a bordo de mis zapatillas. Pero como no hay mal que mil años dure ya estoy de vuelta.
Pese a no encontrarme en plenitud de condiciones y a que conociéndome no me iba a tomar la carrerita a la ligera decidí enrolarme en la tripulación de este Pinsimar 2015, cross que transcurre por la pedanía ilicitana de La Marina y que vengo disfrutando los últimos tres años.
Resaltar la más que correcta organización, este año incluso mejor que los anteriores ya que se dispuso la salida y meta en la avenida principal de la localidad, próxima a un recinto donde se podía disfrutar del avituallamiento a la sombra, haciendo de la charla postcarrera (esta es la mejor parte y la que más disfruto) un autentico placer.




El recorrido sufrió pues una ligera modificación que no alteró la distancia recorrida 8650m (mi gps marcó 8750). Bolsa del corredor... pues eso bolsa, solo llevaba papeles y camiseta técnica (tampoco es cuestión de quejarse ya que la carrera tiene un carácter benéfico). Las duchas se disponen en el centro deportivo municipal a escasos metros. En definitiva felicitar al club de atletismo local que organiza el evento.  
La prueba comenzaba a las 9:30h, la mañana nos recibió con un tiempo magnífico, día soleado y sin viento aunque no excesivamente caluroso (en cualquier caso a mí el calor no me preocupa) y por allí me presenté con algo más de una hora de antelación para calentar e imbuirme de espíritu runner. Recogida de dorsal y chip y a trotar.... pronto pude saludar a  Cesar junto al que debuté en mi primera carrera ya hace tres años, una "media" casi sin entrenar.... ¡Madre mía! aquello si que fue un suplicio. Más tarde me tropecé con mi gran amigo Jesús Molina, corredor veterano de los que ya corrían cuando esto no estaba de moda... Sigue apurando el tiempo, las prisas no lo apabullan... Y entre unas cosas y otras llegó el mágico momento de tomar la salida. Y salimos...
Este año el nivel de los corredores ha sido algo mayor. El grupo de los que corren como gamos llegaba a la decena y el de los que estamos ahí, pisándoles los talones, pues si cabe más numeroso. Pronto se formo un grupo cabecero que se lanzó a tumba abierta hacia la playa. Estos primeros 4/5 kms son en ligera bajada lo que unido al optimismo de los metros iniciales y al subidón de adrenalina hace que el cronometro marque tiempos propios de un correcaminos.
No tenía muy clara en esta ocasión  la estrategia a seguir, dependía del ritmo marcado por los chicos de mi nivel... pero ¡qué coño! veo a Sansano en el grupo de cabeza. Como he podido seguirlo alguna que otra vez me pego a su retaguardia y rezo por que se descuelgue pronto. No me veo aguantando mucho ahí.   Andaba mirando el reloj por el km 2 y me sorprende ver que estábamos corriendo cerca de los 3' el km (finalmente a 3'12"). Hasta el km 4 el grupo no se rompe y el gran Sansano no empieza a hacer la goma (yo ya la venía haciendo)... Respiro tranquilo, el ritmo baja lentamente y nos presentamos en la playa (km 5) a una media algo superior a 3'20", con una cómoda ventaja con los perseguidores y  ya definitivamente descolgados de los que nos precedían. 
Ya en tierra de nadie había que conservar posición y no perder en la parte más dura del recorrido lo ganado hasta entonces. Durante los primeros metros por el camino arenoso sigo chupando rueda pero pronto me decido a tirar un poco ya que me encuentro dentro de la zona de confort. Llegados al último 1,5 km que en ligera subida conduce a la meta veo que por atrás nos están cogiendo. No podemos ceder ahora, aprieto los dientes y para arriba, Sansano empieza a perder unos metros y pronto enfilamos los últimos. Las diferencias son escasas, escucho los aplausos de la gente a mis espaldas y calculo unos 5/6 segundos, suficiente para llegar. Finalmente 8º (1º vet C) , no podía aspirar a nada mejor dado que los que me precedieron eran muy superiores (aunque esta vez no estuve tan lejos). La carrera se la llevó una vez más Raúl Guevara, secundado en el podio por Mateo Pesquer y Fco.Vicente Maciá





Y como dije anteriormente llegó el momento de disfrutar de las endorfinas y del placer de sociabilizar con amigos y desconocidos. Saludo a Tano este año corrió la Maratón de París, ¡qué suerte!, a Kiko¡vaya figura! venía de correr la víspera los 10k de Rafal donde gano su categoría y aquí repite podio. Departo con Ramón Céspedes, fantástico y rápido corredor y triatleta. Por allí andaban los hermanos Rico etc etc....
Mientras comienza la entrega de trofeos comparto charla, fotos y sonrisas con dos runners de mi pueblo (ella 2ª vet c) que hacen de la espera un rato de lo más ameno y entrañable.
Y eso fue todo, en quince días si la salud nos respeta, más. Prefiero no castigar mucho el físico llevado por la euforia, que me conozco y las lesiones asomarán tras la esquina en cuanto me descuide.






Como no de solo carreras vive el hombre me gustaría compartir y recomendar un par de libros que cayeron en mis manos últimamente:

"Las hermanas Makioka" de Junichiro Tanizaki. Hermoso relato sobre el transito de Japón hacia la modernidad en los años previos a la 2º guerra mundial, desde la óptica de una familia acomodada venida a menos. Sorprende como pese a la lejanía cultural, geográfica y temporal nos vemos contagiados de la melancolía y sentida nostalgia de sus personajes.


"El templo del Alba" de Yukio Mishima". Forma parte de una tetralogía aunque se puede leer por separado. Ameno relato de delicada prosa. Bellas descripciones del exótico oriente de mediados del siglo XX junto a reflexiones más profundas sobre el budismo, la reencarnación y  los cambios de una sociedad que se asoma al abismo.  
Me estoy aficionando a los autores japoneses...